viernes, 25 de septiembre de 2009

Al castigo del vértigo




Retengo de forma indolente
el sueño en que te eriges
ciñendo a la tuya mi fantasía
no quiero detener el dorado remolino
si a la descarga das comienzo
cuando los peces renacen en la lluvia
indolentes al castigo del vertigo.

¡Que importa al vuelo hecho fuego!
si en la transparencia agitada en que te miro
innumerables se abocan los recuerdos
como desensartadas perlas
fraguando una irremediable espera en la partida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario