martes, 5 de octubre de 2010

Entre sábanas mundanas me pierdo








Nada se define a pesar de mi existencia
En el espejo del tiempo,
Violo la dictadura del deseo,
derretida de luz,
corrida de sombras

De tu recuerdo quedan,
Telarañas,
brumosas tempestades,
un pedazo imborrable de mi misma
y un viejo itinerario de letanías,
líquidas acariciadas olas,
la fiebre sembrada por la lluvia.
agrietados rostros
por el correr del tiempo.

De tu recuerdo queda,..
la soslayada muerte que no duele,
bajo los prejuicios de la pena,
una sufrida lágrima de invierno.
un destejer de culpas
sinfonías del silencio,
y el rostro parco de la Monaliza,

De mi presente
tu nombre ha quedado
en el trazo pulcro de las hojas,
entre los pétalos azulados que me adornan.

Enterradora de insomnios,
en el azar del tiempo
sin más destino,
que un viejo pasaporte pisoteado,
peinando arrugas al devenir de mi historia.
despolvándome de todas mis ausencias

Entre sábanas mundanas me pierdo,
Irreverente, irredenta
donde el extasiado infinito se ha perdido
Haré un alto en mi andar en el camino
con las venas abiertas,
y esa música mágica, efímera,
como un canto cósmico de estrellas
entonces...
me perderé en la nada.

jueves, 30 de septiembre de 2010

Palabras a la deriva...




En la carcajada del delirio
Ascendiendo hacia el olvido
te busco aún, entre mis pasos tardíos,
en tu silencioso mundo,
teñido de arenas desiertas.

Me duele este lenguaje que agoniza tercamente,
esta inmediatez,
este desplumarme de todos mis sentidos
fraguando las trampas del hoy,
como una obra inconclusa me pienso…
¡pero mis noches no las matan ningún sol!

Soy la de siempre, la eterna
un relámpago de lo invencible,
el mundo externo enojado
en el bosque de mi mente.

Soy la que sobre el viento del misterio
escucha la resonancia del agua,
como acorralando el alma,
los ecos de un yo no se,
palabras a la deriva,
que se pierden en esta soledad.

Doris Melo
oct . 2010

domingo, 26 de septiembre de 2010

Barco sediento de realidades.






En la colección de mañanas dormidas
un rebote de luces perseguidas
me rasga la piel con esperanza,
pero tu silencio me retiene en el aire
y las paredes blancas recortan tu espera.

Mientras me emborracho de olvidos
los pensamientos me muerden el sueño
navegando entre galerías de nostalgia,
en los laberintos del recuerdo.

Acelerando mis caminos de historias
soberbia, colmada de lívidas ansias
en mi gruta de fuego me pierdo
arrebatando mis sentidos
mi piel se columpia
en el pensamiento de algún amante
por la vereda de lo intangible.

Voces libertas cantan al unísono dentro de mí
retomando mi piel de palabras
para transparentar lo invisible
envuelta en la neblina de la distancia.

miércoles, 19 de mayo de 2010

Por la vereda de lo intangible.




En la colección de mañanas dormidas
un rebote de luces perseguidas
me rasga la piel con esperanza,
pero tu silencio me retiene en el aire
y las paredes blancas recortan tu espera.

Mientras me emborracho de olvidos
los pensamientos me muerden el sueño
navegando entre galerías de nostalgia,
en los laberintos del recuerdo.

Acelerando mis caminos de historias
soberbia, colmada de lívidas ansias
en mi gruta de fuego me pierdo
arrebatando mis sentidos
mi piel se columpia
en el pensamiento de algún amante
por la vereda de lo intangible.

Voces libertas cantan al unísono dentro de mí
retomando mi piel de palabras
para transparentar lo invisible
envuelta en la neblina de la distancia.



2010
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En la avenida de la soledad.





En la quietud huesuda de la noche
distancias arden.
mensajes mirlos,
con un frívolo aire de tragedia
en la avenida de la soledad.

La más frágil
un tanto estrecha para otros.
esa que tanto transité
con su regia soledad y su historia plateada,
sin resistirme al tiempo
al que me expongo
saltando desde mi conciencia.

Yo soy como Medusa
violadora de normas
¡que inmensa dicha la mía!
sin el hombre que me robe las fuerzas.

2010
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Magia del tiempo


En la magia del tiempo
con tu olor engarzado en mi piel
vacío mis sentidos,
volcándome al desliz de la nostalgia
quisiera odiarte pero no puedo.

Árboles inmutables
guardan el devenir de mis días,
de acogedora armonía
en el aroma intenso lloviznado

La nívea tarde distraída
entretejida se divierte
en paraísos efímeros
cavando con mi rostro
una fosa a mi sueño.


Doris Melo
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2010
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